Vamos a enseñarte un par de secuencias de una película que queremos rodar, a ver qué te parecen.
En la primera vemos una fiesta en una terraza. Es por la tarde, el sol comienza a caerse por el horizonte tiñendo de naranja y rojo el cielo de la ciudad. Sobre la mesa plegable de madera hay vasos de diferentes colores con vino o cerveza. Unos altavoces emiten una suave música que apenas se oye debido al volumen de las risas. Un chico con barba está imitando a la pequeña rana de cerámica que adorna una esquina. Una chica se tumba sobre la hierba artificial, como si las carcajadas le impidieran seguir de pie. El protagonista le da la vuelta a las hamburguesas que prepara en la barbacoa portatil. Otro chico, nervioso, ordena por tamaño las pequeñas macetas de cáctus mientras torpemente intenta seducir a otra chica que está sentada en un puff. La brisa sopla suave. Alguien dice: “¡Vamos a hacernos una foto”. El protagonista baja el fuego, se quita el delantal y todos se agrupan. El chico de la barba sostiene a la rana contra su pecho y la chica de las carcajadas hace lo mismo con la maceta de buho. Se hacen un selfie de grupo para inmortalizar el momento, aunque en realidad no hace falta: recordarán esa fiesta cada comienzo de primavera.
La siguiente secuencia ocurre en el mismo escenario, en esa terraza urbana, pero ahora es verano y de noche y solo hay dos personas: el protagonista y una chica que lleva un vestido corto. Ambos están sentados frente a frente. Sobre la mesa de madera una maceta con flores, una lámpara con forma de pelícalo, una botella de tinto, dos vasos vacíos y dos platos llenos: no tienen hambre. Por todas partes hay repartidas velas, llamas que llenan el aire de un olor afrutado. La chica se descalza para sentir la hierba artificial en los pies. El bullicio de la ciudad se escucha de fondo, constante como el rumor de las olas, pero ellos no lo oyen. Un avión cruza el cielo nocturno y el chico le propone imaginar que es una estrella fugaz y pedir un deseo. Están a punto de darse su primer beso. No será el último. La noche acaba de empezar.
¿Te interesa la peli? Bien, pues estamos buscando protagonista y hemos pensado en ti. Y en tu terraza. En BAUHAUS tienes todo lo necesario para decorar la película de tu vida y hacerla inolvidable. Échale un vistazo a su completo catálogo y deja volar tu imaginación. En cuanto a la chica, bueno, eso ya es cosa tuya.
·Créditos Terraza Bauhaus·
Rana verde
Ranas gris
Puf pera polipiel
Flores artificiales
Detalle cactus
Botellas cristal envejecidas verdes
Plantas reales: Yucca y Dracena Marginata